Con frío pero sin cierzo, así transcurrió la jornada del domingo. Una pateada suave y sin muchos desniveles que fue el aperitivo de la comida anual del club.
Acompañados de un paisaje muy navideño y con las peñas de Santo Domingo y el Pirineo de telón de fondo, subimos a Puy Moné.
De vuelta en Luesia nos esperaban los tradicionales garbanzos con cigalas y el conejo escabechado que disfrutamos juntos para despedir un año cargado de actividades en la montaña y buenos y divertidos momentos con los amigos.
Desde el club os deseamos a todos un feliz año 2018.
Disfrutar mucho.
La comida seguro que estaba muy buena;18 para caminar y 28 para cocinar.
ResponderEliminarTrata de no abrir el melón.
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